Ahí vienen dos:
uno se moja
y el otro no.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Me pones y me quitas, me tomas y me dejas, conmigo no tiritas y estoy hecho de madejas.
Me pisas y no me quejo, me cepillas si me mancho, y con mi hermano gemelo bajo tu cama descanso.
Aunque la quite del agua, sigue en agua.
Una piel que es otra piel, una mano que no es mano y el frío se aguanta bien.
Con dos patas encorvadas y dos amplios ventanales quitan sol o dan visión según sean sus cristales.
Tengo copa y no soy árbol, tengo alas y no soy pájaro; protejo del sol a mi amo, en invierno y en verano.
Redondito, redondón, no tiene tapa ni tapón.
Me lleváis, me traéis, y si sois nuevos quizás me mordéis.
Una copa redonda y negra, boca arriba está vacía, boca abajo está llena.
Resuélveme este dilema: «soy una, pero soy media».