Es mi madre tartamuda,
y mi padre «cantaor»,
tengo blanco mi vestido,
amarillo el corazón.

En un cuartito caliente, hay bailando mucha gente.

Con el dinero lo compro, con los dedos lo deslío, por la cara me lo como.

Vengo de padres cantores aunque yo no soy cantor, traigo los hábitos blancos y amarillo el corazón.

¿Qué se corta sin tijeras y aunque a veces sube y sube nunca usa la escalera?

Yo soy el diminutivo de una fruta muy hermosa, tengo virtud provechosa, en el campo siempre vivo y mi cabeza es vistosa.

Negra por dentro, negra por fuera, es mi corazón negra madera.

Soy amarillo por dentro, tengo blanco el cascarón, y aquí me hizo famoso, un tal Cristóbal Colón.

De leche me hacen, de ovejas y cabras que pacen.

Del nogal vengo, y en el cuello del hombre, me cuelgo.

Blanco es, la gallina lo pone, con aceite se fríe y con pan se come.