adivinanzas para niños

Formamos, como soldados, en una fila
y somos carniceros toda la vida

 

más adivinanzas del cuerpo humano...

Una señora, muy enseñoreada, siempre va en coche y siempre va mojada.

Si los abro veo si los cierro sueño.

Tengo un tabique en el medio y dos ventanas a los lados por las que entra el aire puro y sale el ya respirado.

Guardada en estrecha cárcel por soldados de marfil, está una roja culebra, que es la madre del mentir.

¿Qué planta será la que en el hombre está?

Uno se cree superior, el otro inferior se siente, sin decirse nunca nada, mucho se quieren, tanto que, siempre se están besando.

Adivina, adivinanza, tiene un solo ojo y una cara ancha.

Hay en la plaza nueva un monte, y en él dos cuevas. Más abajo un pozo hondo que tiene el brocal rojo. Altas ventanas, iguales, y en ellas, dos niñas bellas que, a través de los cristales, todo lo ven y lo observan.

Si aciertas esta pregunta, te anotarás un buen tanto: ¿qué cosa acabada en punta tienes entre risa y llanto?

Dos niños en un andén, por más que se acerquen, no se ven. ¿Qué es?.