Tiene agua y no es botijo,
está siempre en el jardín.
Cada vez que se enrosca,
aunque no espanta a una mosca
tiene pinta de reptil.
¿Qué será?
más adivinanzas de cosas de la casa...
Ruedo y ruedo, y en los bolsillos me quedo.
Te lo digo y no me entiendes, no tengo boca y si tengo dientes
Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.
Habla y no tiene boca, oye y no tiene oído, es chiquito y hace ruido, muchas veces se equivoca.
Aunque de comida voy cargado, la gente me vacía, y nunca soy tragado.
Lo usa el tendero para comer, lo lleva entero si sabes leer.
Tiene un ojo y nada ve, por abrir no es cosa dura, sin embargo por cerrar, sí que cierra y sí que es dura.
Soy de cabeza redonda y me sostengo en un solo pie. Soy de tal fortaleza que a Dios hombre sujeté.
Adivíname ésa.
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.