adivinanzas para niños

Con la cama de un navío
y casa de centinela,
se hace el nombre de mi dama
sin que le falte una letra.

 

más adivinanzas de nombres propios...

Con «V» empieza mi nombre, suelo ir con la corriente, dicen de mí -por costumbre- que donde voy, va la gente.

Nace en el mar, muere en el río. Ese es mi nombre... ¡pues vaya un lío!

Detrás de una esquina, hay una tina llena de flores, si eres discreta, acierta mi nombre.

Dime, ¿qué te tomas en nombre de esta persona?

«Sí mona, así te quiero», un galán aseguraba y a su dama así le daba, astuto, su nombre entero.

Caminando por la calle con un hombre me encontré, para saludarlo tuve que sacar los dedos del pastel. Ya te dije el nombre del hombre aquel.

Del mar salió mi nombre y, tan desgraciada nací, que, huyendo de la desgracia, contra una garita di.

De Isabel, quitando el «bel», y de Lucas, lo postrero. ¿Cómo se llama la joven? Adivina, caballero.

Empieza por te y acaba en esa, ¿quién será esa?

Tiene cuatro letras, cuatro nada más, si repites una sílaba, su nombre dirás.