Hablo y no pienso,
lloro y no siento,
río sin razón y miento
sin intención.
más adivinanzas de animales...
Anido en las torres, largo cuello tengo y todos los años por San Blas vengo.
De colores muy galano, soy bruto y no lo parezco, perpetua prisión padezco, uso del lenguaje humano, si bien de razón carezco.
¿Quién es este que se arrima trayendo su casa encima?
¿Qué es, qué es, del tamaño de una nuez, que sube la cuesta y no tiene pies?
Anda, nada, vuela, no gasta zapato, va dejando estela.
Salta y salta, y la colita le falta.
Alas de mil colores y se pierden entre las flores.
Topó mi padre en la iglesia con uno vestido de negro, ni era fraile, ni era cura, que era lo que dije primero.
Con cuello largo y finito se pasea muy feliz, sólo si fueras mosquito le verias la nariz.
Mi reinado está en el mar, soy de peso regordeta; un día, siglos atrás, me tragué entero a un profeta aunque luego lo expulsé al pensar que estaba a dieta.