La noche tiene un ojo,
un ojo de plata fina
y usted será muy flojo,
muy flojo, si no adivina
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Doy calorcito, soy muy redondo, salgo prontito y tarde me escondo.
Una gran moneda dorada que vale mucho y por la que no pagas nada.
Tan redonda como un queso, nadie puede darle un beso.
Dicen que soy rey y no tengo reino; dicen que soy rubio y no tengo pelo; dicen que ando y no me meneo; arreglo relojes sin ser relojero.
Soy un señor encumbrado, ando mejor que un reloj, me levanto muy temprano y me acuesto a la oración.
¿Qué cosa es esa cosa que entra en el río y no se moja?
Toda mi vida en un mes; mi caudal son cuatro cuartos y aunque me ves pobrecita ando siempre muy alto.
De día yo me levanto, de noche a la cama voy, tiño de rojo el ocaso, ¿a qué no sabes quién soy?
Salimos cuando anochece, nos vamos si canta el gallo, y hay quien dice que nos ve cuando le pisan un callo.
Aparecen de noche sin que las llames. Desaparecen de día sin que las roben. ¿Qué son?
