Una adivinanza
te voy a poner
a ver si adivinas
lo que es:
Tiene dos patitas
y no tiene pies;
plumas de colores
y pico también.
Cuando tiene hambre
suele decir «pío»;
cuando tiene frío
se mete en el nido.

Por más que se suena el moco le cuelga.

Volando en el aire, y besando las flores, se pasa su vida, de luz y colores.

Anda, nada, vuela, no gasta zapato, va dejando estela.

Aunque yo llevo pijama, siempre ando muy despierta, por no servir al león de suculenta merienda.

Dos torres altas, dos miradores, un quitamoscas, cuatro andadores.

Larga y lisa, larga y lisa, llevo puesta una camisa, toda bordada, bordada, sin costura ni puntada.

Alas de mil colores y se pierden entre las flores.

En alto vive, en alto mora, en alto teje, la tejedora.

Con su trompa preparada pasa a tu lado zumbando, se posa en tu piel desnuda y tu sangre va chupando.

En dos castañuelas voy encerrado y al sacarme del mar me pongo colorado.