Larga y lisa, larga y lisa,
llevo puesta una camisa,
toda bordada, bordada,
sin costura ni puntada.
más adivinanzas de animales...
María Penacho parió un muchacho, ni vivo ni muerto, ni hembra ni macho.
Aunque yo llevo pijama, siempre ando muy despierta, por no servir al león de suculenta merienda.
¿Quién allá en lo alto en las ramas mora y allí esconde, avara, todo lo que roba?
Un bichito verde sobre la pared, corre que te corre, busca qué comer.
No vuela y tiene un ala, no es camión y hace «cran».
Si la tienes tú la buscas, si no la tienes, ni la buscas, ni la quieres.
Mil damas en un camino sin polvo ni remolino.
A la orilla de los ríos, croan sin meterse en líos, saltos dan, mas no son osos sino animales verdosos.
Viste de chaleco blanco, y también de negro frac, es un ave que no vuela, pero nada. ¿Que será?
No es cama, ni es león y desaparece en cualquier rincón