Aunque tengo cuatro patas,
yo nunca puedo correr,
tengo la comida encima,
y no la puedo comer.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Que timbre y número tenga y en verdad portal no sea es cierto, y el que desea hablar por él, no lo cuelga.
Está hecha de metal, de madera o de cristal y golpes siempre recibe cuando la entrada prohíbe.
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
En el campo fui nacida, vestida de verdes ramas, y al pueblo me trajeron, para servir a las damas, a mí todo me regalan, caramelos, miel, melada, mas yo todo lo reparto, porque no sé comer nada.
Adivíname ésa.
Sin ella en la mano ni entras ni sales, ni vas a la calle.
¿Quién será la desvelada, lo puedes tú discurrir? día y noche está acostada y no se puede dormir.
Con patas y espalda, no se mueve ni anda.
Caja llena de soldados, todos largos y delgados, con gorritos colorados.
La cara que yo acaricio, dejo de seda al momento, porque ni un pelo se resiste a mi marcha, ¡buen invento!
