A veces blanquita,
a veces negrita
y siempre bolita.
más adivinanzas de frutas...
A esta fruta se le culpa y fue cosa del demonio, pues comieron de su pulpa los del primer matrimonio.
Tengo duro cascarón, pulpa blanca y líquido dulce en mi interior.
Campanita, campanera, blanca por dentro, verde por fuera, si no lo adivinas, piensa y espera.
Era un sol en miniatura y en el árbol la encontré. Cuando sin piel la dejé, me fascinó su frescura. ¿Qué es?
A mi me tratan de santa y traigo conmigo el día, soy redonda y encarnada y tengo la sangre fría.
Del nogal vengo, y en el cuello del hombre me cuelgo.
Ave me llaman a veces y es llana mi condición.
Una madre con cien hijas y a todas pone camisas.
Arca, monarca, llena de placer; ningún carpintero te ha sabido hacer.
No soy de oro, plata no soy; ya te he dicho quién soy.