Cuando me caliento hasta los talones
aliso camisas y pantalones.
más adivinanzas de costura y plancha...
Pequeños, redondos, con agujeritos, valemos muy poco, solos o juntitos, mas de nosotros depende el buen vestir de la gente.
Largo, largo, como un camino y cabe en un «pucherino».
Soy alta y delgada, tengo un ojo, hago vestidos y no me los pongo.
Vengo al mundo a trabajar, y tengo tan mala suerte, que todos me pinchan el culo, y yo no me puedo quejar.
Una señora, muy aseñorada, tiene muchos dientes y se cose a puntadas.
Locomotora no soy, mas cuando con vapor voy, dejo muy alisado si me usan con cuidado.
Te la digo, te la digo, te la vuelvo a repetir; te la digo veinte veces y no me la sabes decir.
Dama da, dama deja, y no se queja de lo que deja.
Seguro que en tu casa está si no lo sabes no importa. Pero ¿qué cosa será que cuanto más larga más corta?
Verde fue mi nacimiento y amarillo fue mi abril; tuve que ponerme blanco para poderte servir.
