De mi ojo cuelga
un hilo largo,
que une las telas
y hace las prendas.
más adivinanzas de costura y plancha...
Cuanto más largas más cortas, cuanto más cortas más largas.
Vengo al mundo a trabajar, y tengo tan mala suerte, que todos me pinchan el culo, y yo no me puedo quejar.
Pica, picando, colita arrastrando.
Pequeños, redondos, con agujeritos, valemos muy poco, solos o juntitos, mas de nosotros depende el buen vestir de la gente.
Seguro que en tu casa está si no lo sabes no importa. Pero ¿qué cosa será que cuanto más larga más corta?
Con «A» empieza mi nombre, de las damas soy querido, si me prenden voy seguro, y, si me sueltan, perdido.
Dos hermanas diligentes que caminan al compás, con el pico por delante y los ojos por detrás.
Dama da, dama deja, y no se queja de lo que deja.
Cuando me caliento hasta los talones aliso camisas y pantalones.
Tengo pie y no tengo boca, hilo meto, hilo asomo, tengo dientes y no como.