Fui a la plaza
y compré un negrito.
Llegué a la casa
y se puso coloradito.
¿Qué es?
más adivinanzas de cosas de la casa...
Ruedo y ruedo, y en los bolsillos me quedo.
Durante el verano escondido, en el invierno encendido.
Pequeña como una pera y alumbra la casa entera.
Tiene un ojo y nada ve, por abrir no es cosa dura, sin embargo por cerrar, sí que cierra y sí que es dura.
Quien me mira se refleja así nadie tendrá una queja.
¿Quién pensaréis que yo soy, que cuanto más y más lavo, mucho más sucia me voy?
Es una caja habladora, que vive en todas las casas, y se calla a muy alta hora.
Está hecha de metal, de madera o de cristal y golpes siempre recibe cuando la entrada prohíbe.
Cabezón y muy delgado, que se pone siempre negro, después de haber sido frotado.
Poseo dientes y ojos y para hacerme trabajar me has de meter en cerrojos.
