Le hacen correr sus caballos
y nunca le salen callos.
más adivinanzas de la ciudad y la calle...
Alta y delgada, cabeza brillante, ilumina de noche a los caminantes.
Lugar de compra, lugar de venta, donde cada ama de casa hace su cuenta.
Vivo entre dos muros que no pueden verse y aunque no me doblo me dobla la gente.
Le hacen correr sus caballos y nunca le salen callos.
Zapatos de goma, ojos de cristal, con una manguera lo alimentarás, dentro del garaje lo sueles guardar.
Por caminitos de hierro, el gusano de metal, en su barriga transporta la gente por la ciudad, llevándola por un túnel en completa oscuridad.
Hombrecitos de colores, metidos en una caja, sin hablar nada te dicen: ¡peligro!, ¡cuidado!, ¡pasa!
Todos me pisan a mí, pero yo no piso a nadie; todos preguntan por mí, yo no pregunto por nadie.
Con sólo tres colores ordeno a cada uno. Si todos me respetan no habrá accidente alguno.
Ciudadano muy mirado, moderno camaleón, subido en tu árbol, cambias de color.