Sólo una faja es mi vestido,
cuando me lo quitan arranco a bailar.
Pies y manos no tengo,
pero a los más jóvenes entretengo.
más adivinanzas de juegos y juguetes...
Dieciséis personajes, con el rey y la reina, se enfrentan a otros tantos: si juegas mal te encontrarás perdido ¡y ganará el contrario!
Cuanto más y más lo llenas, menos pesa y sube más.
Un combate que se entabla muy lento o con rapidez; ninguno de los dos habla; las piezas son más de diez.
Yo-yo me subo, yo-yo me bajo; si lo adivinas eres muy majo.
Juegan en la cancha más altos que bajos; meten la pelota dentro de los aros.
Tengo caballos que suben y bajan, dan vueltas y vueltas y nunca se cansan.
Miras adelante, haces ejercicio, das a los pedales, tienes equilibrio.
El rey y la reina con ocho peones, caballos y torres, combaten y comen.
Todos corren, uno pita, dos detienen, muchos gritan.
Un mundo de fantasía cargadito de ilusiones, despierta nuestra alegría entre tantas atracciones.
