Tengo patas bien derechas,
mas no me puedo mover,
llevo a cuestas la comida
y no la puedo comer.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Cuatro patas tiene y no puede andar también cabecera sin saber hablar.
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.
La cara que yo acaricio, dejo de seda al momento, porque ni un pelo se resiste a mi marcha, ¡buen invento!
Golpe va, golpe viene y en su puesto se mantiene.
Pequeña como una pera y alumbra la casa entera.
En lo más alto me ponen para que el viento me dé, soy guía para los hombres y siempre estoy de pié.
En lo más alto me ponen para que el aire me dé. El aire me zarandea, Y siempre lo miro a él.
Una caja en tu casa que te sube y que te baja.
