Un espléndido abanico
que no produce pavor,
sus alas, plumas y pico
son reales, sí señor.
más adivinanzas de animales...
De colores verderones, ojos grandes y saltones, tenemos las patas de atrás muy largas para saltar.
Garra pero no mata, pata pero no de vaca.
¿Quién hace en los troncos su oscura casita y allí esconde, avara, cuanto necesita?
No vuela y tiene un ala, no es camión y hace «cran».
Teje con maña, caza con saña.
Grandes patazas, chicas manitas, lindos colores en mis alitas, salto y no sé dónde caeré.
Nace en la dehesa y come en tu mesa.
Envuelto en un cobertor, haga frío o calor.
Soy sabia y no tuve escuela para mí no hubo doctrina soy maestra de cocina y cocino sin candela.
Mi reinado está en el mar, soy de peso regordeta; un día, siglos atrás, me tragué entero a un profeta aunque luego lo expulsé al pensar que estaba a dieta.
