adivinanzas para niños

Un espléndido abanico
que no produce pavor,
sus alas, plumas y pico
son reales, sí señor.

 

más adivinanzas de animales...

Trabajar, siempre mucho trabajé; aunque nunca estudié en la escuela me conocen bien; algunos dicen de mí: «terco bicho es» y Pinocho mucho se asustó cuando en mí casi se convirtió.

Si te pregunto cómo se llama este gran bicho, ya te lo he dicho.

Es blanca como la nieve, es negra como el carbón, las patas como una vela, el cuello como una hoz.

Es la reina de los mares, su dentadura es muy buena, y por no ir nunca vacía, siempre dicen que va llena.

Con cuello largo y finito se pasea muy feliz, sólo si fueras mosquito le verias la nariz.

De celda en celda voy pero presa no estoy.

Lo mismo que un galgo valgo, su retrato soy y amigo, y si por el campo salgo, las liebres mucho persigo, y es cierto que no soy galgo.

Tiene lamparitas de luz verde y cuando es de noche las enciende.

Grandes patazas, chicas manitas, lindos colores en mis alitas, salto y no sé dónde caeré.

El roer es mi trabajo, el queso mi aperitivo y el gato ha sido siempre mi más temido enemigo.