Todos me buscan,
para descansar,
si ya te lo he dicho,
no lo pienses más.
más adivinanzas de cosas de la casa...
En la mesa me ponen y sobre mí todos comen.
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.
Un campo bien labrado no gasta reja ni arado.
Dicen que tiene y no tiene, mucho pincha, poco retiene.
Si me mojas hago espuma, con ojitos de cristal, y tu cuerpo se perfuma, mientras llega mi final.
No pienses que es una col, o que baila el chachachá; búscala sobre tu cama, que yo te la he dicho ya.
Aunque yo nunca me mueva por mí suben, por mi bajan; soy de diversas materias y mi utilidad la halagan.
A la entrada de tu casa algo suena si lo aprietan y tu sales presurosa a abrir deprisa la puerta.
¿Qué cosa es si hace espuma, lava la ropa y huele muy bien?
Soy de cabeza redonda y me sostengo en un solo pie. Soy de tal fortaleza que a Dios hombre sujeté.
