Dos niñas van a la par,
y no se pueden mirar.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Dicen que son de dos, pero siempre son de una.
No es reloj, pero hace TIC TAC, no usa pilas pero no para de andar...
Al revolver una esquina me encontré con un convento, las monjas vestidas de blanco, la superiora en el centro, más arriba dos ventanas, más todavía un par de espejos y en lo más alto la plaza donde pasean los caballeros.
Dos estrellas se han perdido, en el cielo no aparecen, en tu casa se han metido y en tu cara resplandecen. ¿Qué son?
Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.
Hay en la plaza nueva un monte, y en él dos cuevas. Más abajo un pozo hondo que tiene el brocal rojo. Altas ventanas, iguales, y en ellas, dos niñas bellas que, a través de los cristales, todo lo ven y lo observan.
¿Qué instrumento se puede escuchar, pero no se puede ver ni tocar?
Con ella vives, con ella hablas, con ella rezas y hasta bostezas.
Dos hermanos sonrosados, juntos en silencio están, pero siempre necesitan separarse para hablar.
Dos niñas asomaditas, cada una a su ventana, lo ven y lo cuentan todo, sin decir una palabra.