Cabecita fría
la noche haces día
cuando te restriego,
cabeza de fuego.
más adivinanzas de cosas de la casa...
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Que timbre y número tenga y en verdad portal no sea es cierto, y el que desea hablar por él, no lo cuelga.
Del techo al suelo, cortada y fina, tela con vuelo.
Hay un hijo que hace nacer a la madre que le dio el ser.
Aunque al dormir me consultan, nunca suelo contestar.
Chiquita como un ratón guarda la casa como un león
Sale de la sala, entra en la cocina, meneando la cola como una gallina.
Te lo digo y no me entiendes, no tengo boca y si tengo dientes
Muchos golpes recibe cuando a la gente, la entrada prohíbe.
Al nacer fui maltratada, mi dueño me tiene amor, y aunque soy mujer honrada, me suele tener atada y con guardas mi señor.
