Es verdad que tú le miras,
es mentira que te ve,
sois iguales uno al otro,
está claro que eres él.
más adivinanzas de cosas de la casa...
En un cuarto me arrinconan sin acordarse de mí, pero pronto van a buscarme cuando tienen que subir.
Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.
Sale de la sala, entra en la cocina, meneando la cola como una gallina.
Un barbecho bien labrado, ni entra mula, ni entra arado.
Aunque tengo cuatro patas, yo nunca puedo correr, tengo la comida encima, y no la puedo comer.
Con mi cara tan cuadrada, lisa o con dibujitos, resignada y por los suelos, me repito, me repito...
Si me mojas hago espuma, con ojitos de cristal, y tu cuerpo se perfuma, mientras llega mi final.
Te lo digo y no me entiendes, no tengo boca y si tengo dientes
Yo tengo calor y frío, y no frío sin calor, y sin ser ni mar ni río, peces en mí he visto yo.
Es verdad que tú le miras, es mentira que te ve, sois iguales uno al otro, está claro que eres él.
