Es verdad que tú le miras,
es mentira que te ve,
sois iguales uno al otro,
está claro que eres él.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Llevo secretos a voces, corriendo por esos mundos y sin que nadie los oiga los doy en unos segundos.
A la entrada de tu casa algo suena si lo aprietan y tu sales presurosa a abrir deprisa la puerta.
Aunque al dormir me consultan, nunca suelo contestar.
Fui a la plaza y compré un negrito. Llegué a la casa y se puso coloradito. ¿Qué es?
Lo usa el tendero para comer, lo lleva entero si sabes leer.
Aunque tengo cuatro patas, yo nunca puedo correr, tengo la comida encima, y no la puedo comer.
Si me mojas hago espuma, con ojitos de cristal, y tu cuerpo se perfuma, mientras llega mi final.
Está hecha de metal, de madera o de cristal y golpes siempre recibe cuando la entrada prohíbe.
Es tu favorita cuando sientes frío; la encuentras escrita en el verso mío.
Es un campo colorado con los surcos muy derechos; muy en alto está situado e inclinado de dos lados.