Kilómetros mido,
hectolitros llevo,
kilovatios doy,
hectáreas mantengo.
más adivinanzas de la naturaleza...
Alto, alto, como un pino, pesa menos que un comino.
Tengo lecho y no me acuesto tengo curso sin ser maestro.
No ves el sol, no ves la luna, y si está en el cielo no ves cosa alguna.
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
En el cielo soy de agua, en la tierra soy de polvo, en las iglesias de humo y mancha blanca en los ojos.
No soy estación del Metro ni soy estación del tren, pero soy una estación donde mil flores se ven.
Millares de soldaditos van unidos a la guerra, todos arrojan lanzas que caen sobre la tierra.
Nazco y muero sin cesar; sigo no obstante existiendo, y, sin salir de mi lecho, me encuentro siempre corriendo.
Lomos y cabeza tengo y aunque vestida no estoy, muy largas faldas mantengo.
Él es tío sin sobrinos, a todos calienta igual. Si no sabes de quién hablo, tras la primavera vendrá.
