Que lo busquen en el mar,
porque en la tierra
por más que aren, que aren,
que en la tierra no lo encuentran.
más adivinanzas sobre el mar y la playa...
Soy pequeño y alargado, en dos conchas colocado, como no puedo nadar, me pego a las rocas del mar.
Un truquito este pez tiene que no todo el mundo sabe: si a su nombre quitas la «ene», va y se transforma en ave.
El padre en el mar y el hijo a rezar.
Dos pinzas tengo, hacia atrás camino, de mar o de río en el agua vivo.
Tengo ocho patas cargadas de ventosas, y paseo por las rocas, meciéndome en las olas. ¿Quién soy?
Adivina quien yo soy: al ir parece que vengo, y al venir, es que me voy.
Llegamos sin cesar, una tras otra, desde el mar a la playa a descansar. A veces, sin embargo, más furiosas, los barcos podemos destrozar.
Si dejas atrás la playa ella te mantiene a raya.
Ella no tiene pies, y si te descuidas, parece un pez.
El que lo pica se hace pez, ¿Quieres que te lo diga otra vez?