Una señora, muy aseñorada,
 tiene muchos dientes
 y se cose a puntadas.
más adivinanzas de costura y plancha...
Vengo al mundo a trabajar, y tengo tan mala suerte, que todos me pinchan el culo, y yo no me puedo quejar.
Siempre de mí dicen algo, aunque muy humilde soy; no soy señor y me tratan, con la nobleza del don.
Te la digo, te la digo, te la vuelvo a repetir; te la digo veinte veces y no me la sabes decir.
Pica, picando, colita arrastrando.
Primero ciega, luego pincha y todo une mientras camina.
Pequeños, redondos, con agujeritos, valemos muy poco, solos o juntitos, mas de nosotros depende el buen vestir de la gente.
Un pie grave, ardiente y plano, va dejando el campo llano y, al pasar, su calentura va dejando en la llanura.
De mi ojo cuelga un hilo largo, que une las telas y hace las prendas.
Soy pequeña y afilada y pincho con mis puntadas.
Seguro que en tu casa está si no lo sabes no importa. Pero ¿qué cosa será que cuanto más larga más corta?
