Me componen cuatro palos
impresos en cartulina.
Tengo reyes y caballos,
seguro que me adivinas.
más adivinanzas de juegos y juguetes...
Once jugadores del mismo color, diez van por el campo, detrás de un balón.
Cuanto más y más lo llenas, menos pesa y sube más.
La pones sobre la mesa, la partes y la repartes pero nadie se la come.
Veintiocho caballeros, de espaldas negras y lisas, delante, todo agujeros, por dominar se dan prisa.
Cómete la «e» y pon una «a». Mírala muy bien y échala a volar.
En un suelo de baldosas unas blancas y otras negras, luchan reyes y peones, caballos, torres y reinas.
Sobre la mesa se pone, sobre la mesa se parte y entre todos se reparte, mas nunca, nunca, se come.
Cubo que seis caras tiene, veintiún puntos en total, en el «Parchís» interviene y en la «Oca»... pues igual.
Con caras muy blancas llenas de lunares a unos damos suerte, a otros, pesares.
Todos corren, uno pita, dos detienen, muchos gritan.