adivinanzas para niños

Son mis colores tan brillantes
que el cielo alegro en un instante.

 

más adivinanzas de la naturaleza...

No soy estación del Metro ni soy estación del tren, pero soy una estación donde mil flores se ven.

Viene del cielo, del cielo viene, a unos disgusta y a otros mantiene.

Kilómetros mido, hectolitros llevo, kilovatios doy, hectáreas mantengo.

En verano barbudo y en invierno desnudo, ¡esto es muy duro!

Aparece por delante, por los lados, por la espalda, te descuidas un instante y te levanta la falda.

Un convento bien cerrado, sin campanas y sin torres y muchas monjitas dentro, preparan dulces de flores.

Son mis colores tan brillantes que el cielo alegro en un instante.

Girando toda su vida, toda su vida girando y no aprendió a ser más rápida da una vuelta y tarda un día, da otra vuelta y tarda un año.

Vuela sin alas, silba sin boca, azota sin manos y tú ni lo ves ni lo tocas.

Como una peonza da vueltas al sol, gira que gira, sin tener motor.