Ani lloró todo el día;
perdió lo que más quería
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Nuestra dueña nos coloca uno a cada lado, siempre pendientes, siempre colgados.
Tengo cinco habitaciones, en cada una un inquilino, en invierno cuando hace frío, están todos calentitos.
Me pones y me quitas, me tomas y me dejas, conmigo no tiritas y estoy hecho de madejas.
De pergaminos, o sedas, o papel hechos estamos; en verano gusto damos; las manos han de estar quedas, si es que nuestro oficio usamos.
Aunque las adornamos a ellas cuando no tenemos carreras, la gente tiene manía de no llamarnos enteras.
Chiquito, redondo, barrilito sin fondo.
Redondo, redondo, sin tapa, sin fondo.
Juntos, en ovillo, duermen los mellizos; cuando se separan, estirados andan.
Dos buenas piernas tenemos y no podemos andar, pero el hombre sin nosotros no se puede presentar.
Tengo copa y no soy árbol, tengo alas y no soy pájaro; protejo del sol a mi amo, en invierno y en verano.