Aunque no hable,
lo cuenta todo por cable.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.
En lo más alto me ponen para que el aire me dé. El aire me zarandea, Y siempre lo miro a él.
Poseo dientes y ojos y para hacerme trabajar me has de meter en cerrojos.
Un campo bien labrado no gasta reja ni arado.
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
En el campo fui nacida, vestida de verdes ramas, y al pueblo me trajeron, para servir a las damas, a mí todo me regalan, caramelos, miel, melada, mas yo todo lo reparto, porque no sé comer nada.
Estoy dentro de él y no puedo entrar en él.
Como conoce la clave, gira por su laberinto y deja entrar al recinto.
Cuanto más se moja, más te seca. ¿Qué es?
Siempre andamos por el suelo de alcobas y de salones y en historias orientales hasta hacemos algún vuelo.
