adivinanzas para niños

Con mi cara tan cuadrada,
lisa o con dibujitos,
resignada y por los suelos,
me repito, me repito…

 

más adivinanzas de cosas de la casa...

Ni corre, ni vuela, pero siempre te precede, cuando vas o cuando llegas.

Que timbre y número tenga y en verdad portal no sea es cierto, y el que desea hablar por él, no lo cuelga.

Tengo dientes y no muerdo, desenredo con cuidado, caminos abro en tu pelo, ya sea liso o rizado.

Es un campo colorado con los surcos muy derechos; muy en alto está situado e inclinado de dos lados.

Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.

Su forma es de pera, aunque es de cristal da luz sin espera para cada cual.

Cabecita fría la noche haces día cuando te restriego, cabeza de fuego.

Es tu favorita cuando sientes frío; la encuentras escrita en el verso mío.

Puede ser de Persia, puede ser de Ana, por más que se enrolle, se ve en la ventana.

Es una caja habladora, que vive en todas las casas, y se calla a muy alta hora.