adivinanzas para niños

Con mi cara tan cuadrada,
lisa o con dibujitos,
resignada y por los suelos,
me repito, me repito…

 

más adivinanzas de cosas de la casa...

Adivíname ésa.

Ni corre, ni vuela, pero siempre te precede, cuando vas o cuando llegas.

Durante el verano escondido, en el invierno encendido.

En un cuarto me arrinconan sin acordarse de mí, pero pronto van a buscarme cuando tienen que subir.

Yo tengo calor y frío, y no frío sin calor, y sin ser ni mar ni río, peces en mí he visto yo.

En lo más alto me ponen para que el aire me dé. El aire me zarandea, Y siempre lo miro a él.

Puede ser de Persia, puede ser de Ana, por más que se enrolle, se ve en la ventana.

De mi madre nací yo, sin fundamento de padre, y luego me he muerto yo y de mi nació mi madre.

Poseo dientes y ojos y para hacerme trabajar me has de meter en cerrojos.

Cuatro patas tiene, así como asiento; de ella me levanto y en ella me siento.