No ves el sol,
no ves la luna,
y si está en el cielo
no ves cosa alguna.
más adivinanzas de la naturaleza...
En el campo soy hallada y al fuego alimento. Donde quiera que soy llevada, es para darme tormento.
En las regiones polares se encuentra en todos los mares.
Hay un hijo que hace nacer a la madre que le dio el ser.
Son mis colores tan brillantes que el cielo alegro en un instante.
Nazco y muero sin cesar; sigo no obstante existiendo, y, sin salir de mi lecho, me encuentro siempre corriendo.
Millares de soldaditos van unidos a la guerra, todos arrojan lanzas que caen sobre la tierra.
Tengo lecho y no me acuesto tengo curso sin ser maestro.
Un convento bien cerrado, sin campanas y sin torres y muchas monjitas dentro, preparan dulces de flores.
No ves el sol, no ves la luna, y si está en el cielo no ves cosa alguna.
Él es tío sin sobrinos, a todos calienta igual. Si no sabes de quién hablo, tras la primavera vendrá.