¿Quién pensaréis que yo soy,
que cuanto más y más lavo,
mucho más sucia me voy?
más adivinanzas de cosas de la casa...
¿Que le pones a una caja que la hace más ligera?
No pienses que es una col, o que baila el chachachá; búscala sobre tu cama, que yo te la he dicho ya.
En un cuarto me arrinconan sin acordarse de mí, pero pronto van a buscarme cuando tienen que subir.
A la entrada de tu casa algo suena si lo aprietan y tu sales presurosa a abrir deprisa la puerta.
Sin ella en la mano ni entras ni sales, ni vas a la calle.
Poseo dientes y ojos y para hacerme trabajar me has de meter en cerrojos.
Un barbecho bien labrado, ni entra mula, ni entra arado.
En invierno se usa porque da calor en verano estorba y se echa al rincón.
Ya ves, ya ves, tan claro que es. No me la adivines de aquí a un mes.
En lo más alto me ponen para que el aire me dé. El aire me zarandea, Y siempre lo miro a él.
