¿Quién pensaréis que yo soy,
que cuanto más y más lavo,
mucho más sucia me voy?
más adivinanzas de cosas de la casa...
En el buen tiempo a nadie marea, en cuanto llueve repiquetea.
Los tejados protejo y buenas canales dejo.
Caja llena de soldados, todos largos y delgados, con gorritos colorados.
Muy bonito por delante y muy feo por detrás; me transformo a cada instante, pues imito a los demás.
Todos me buscan, para descansar, si ya te lo he dicho, no lo pienses más.
Cuatro patas tiene y no puede andar también cabecera sin saber hablar.
Aunque soy iluminada siempre me tienen colgada.
Soy de cabeza redonda y me sostengo en un solo pie. Soy de tal fortaleza que a Dios hombre sujeté.
Es venta y no se vende, es Ana, pero no es gente.
Tiene luna, no es planeta; tiene marco y no es puerta.
