adivinanzas para niños

Sube llena,
baja vacía,
y si no se da prisa,
la sopa se enfría,

 

más adivinanzas de cosas de la casa...

Te lo digo y no me entiendes, no tengo boca y si tengo dientes

En lo más alto me ponen para que el viento me dé, soy guía para los hombres y siempre estoy de pié.

Aunque al dormir me consultan, nunca suelo contestar.

En el campo fui nacida, vestida de verdes ramas, y al pueblo me trajeron, para servir a las damas, a mí todo me regalan, caramelos, miel, melada, mas yo todo lo reparto, porque no sé comer nada.

Cuanto más se moja, más te seca. ¿Qué es?

Caja llena de soldados, todos largos y delgados, con gorritos colorados.

A la entrada de tu casa algo suena si lo aprietan y tu sales presurosa a abrir deprisa la puerta.

Me compran para dormir y me encanta sacudir. ¿Qué soy?

Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.

Puede ser de Persia, puede ser de Ana, por más que se enrolle, se ve en la ventana.