Una cosa
que no es cosa
y lo es.
más adivinanzas de costura y plancha...
¿Quién es esa señora, que tiene la propiedad, de estirar bien lo arrugado y de arrugar lo estirado, con igual facilidad?
Yo con mi hermana gemela andamos siempre al compás, con la boca por delante y los ojos por detrás.
Y lo es, y lo es y no me lo adivinas en un mes.
Si bien empiezo con bo, no soy bota ni botijo, ¡bobo, tonto!, ¡qué lo he dicho!
Largo, largo, como un camino y cabe en un «pucherino».
Cuando me caliento hasta los talones aliso camisas y pantalones.
Te la digo, te la digo, te la vuelvo a repetir; te la digo veinte veces y no me la sabes decir.
Cuando pasa ¡cómo pisa!, deja rasa la camisa.
Seguro que en tu casa está si no lo sabes no importa. Pero ¿qué cosa será que cuanto más larga más corta?
Pico sin tener enojos y, sin nacer, soy de corte, pero muchos, con arrojos, los dedos, viendo mi porte, me los meten por los ojos.