Verde me crié,
negro me volví,
ahora me visten de blanco,
para poderme vender.

Como cuerda yo amarro, como cadenas sujeto, tengo un brazo y muchos dedos enterrados por el suelo.

Mi nombre es de peregrino y tengo virtud notable, me encuentras en los caminos y mi olor es agradable.

Sin el aire yo no vivo; sin la tierra yo me muero; tengo yemas sin ser huevo, y copa sin ser sombrero.

¿Cuál será la planta de hojas verdes, tallo largo y fino que trepa paredes?

Son nuestras blancas flores a veces tan tempranas, que la nieve, envidiosa, viene a ver si nos gana

Entre col y col lechuga, entre lechuga, una flor, que al sol siempre está mirando, dorándose a su calor.

Aunque es madre nunca ha parido, aunque es selva nunca dio abrigo; nace y no sabe andar pero enseguida se pone a trepar.

Siempre mirando al sol y no soy un caracol. Giro y giro sin fin y no soy un bailarín.

Ciertamente tiene nombre de calamar espero que no te asombre si por él voy a trepar.

Su cabeza es amarilla, siguiendo al sol, gira y gira, muchos comen sus pepitas y dicen que son muy ricas.