¿Quién pensaréis que yo soy,
que cuanto más y más lavo,
mucho más sucia me voy?
más adivinanzas de cosas de la casa...
En lo más alto me ponen para que el aire me dé. El aire me zarandea, Y siempre lo miro a él.
Adivíname ésa.
Si me mojas hago espuma, con ojitos de cristal, y tu cuerpo se perfuma, mientras llega mi final.
Habla y no tiene boca, oye y no tiene oído, es chiquito y hace ruido, muchas veces se equivoca.
Aunque tengo cuatro patas, yo nunca puedo correr, tengo la comida encima, y no la puedo comer.
Aunque soy iluminada siempre me tienen colgada.
Un campo bien labrado no gasta reja ni arado.
Es un campo colorado con los surcos muy derechos; muy en alto está situado e inclinado de dos lados.
Es una caja habladora, que vive en todas las casas, y se calla a muy alta hora.
Tengo patas bien derechas, mas no me puedo mover, llevo a cuestas la comida y no la puedo comer.
