Para salir a la esquina
ponte pan en el talón y camina.
más adivinanzas de ropa y vestuario...
Resuélveme este dilema: «soy una, pero soy media».
Me pones y me quitas, me tomas y me dejas, conmigo no tiritas y estoy hecho de madejas.
Ahí vienen dos: uno se moja y el otro no.
Aunque las adornamos a ellas cuando no tenemos carreras, la gente tiene manía de no llamarnos enteras.
El pie tapo al instante igual que si fuera un guante.
Con varillas me sostengo y con la lluvia voy y vengo.
Hoy cuando me levanté, puse uno en cada pie. Como no son los zapatos, dime tú... ¿qué puede ser?
Tienen justo cinco dedos como la mano; se rellenan en invierno, se vacían en verano.
Destacan en las orejas creyéndose independientes, van casi siempre en parejas.
Santa con nombre de flor, y, a pesar de este retrato, me confunden con zapato.
