Tengo agujas y no sé coser,
tengo números y no sé leer.
más adivinanzas sobre el tiempo...
Doce palomitas en un palomar, a la hora y a los cuartos salen a volar.
Me hallo en los escritorios y en las casas comerciales, todos me miran quien soy para ver lo que contengo. Mis días están contados y el día que voy a morir ya se sabe de antemano.
Como te cases o te embarques en este día fatal, todo te saldrá mal.
En un castillo redondo, doce caballeros de guardia están; un flaco lancero y un gordo escudero, marchan al compás.
Somos sesenta mellizos, en torno de nuestra madre, tenemos sesenta hijitos y toditos son iguales.
Estoy condenado a un año y un día; si esto es cada cuatro, ¿mi nombre, sabrías?
Doce son los hermanitos, uno es el benjamín, siete son los mayorcitos y los cuatro restantes los más pequeñitos.
De siete en siete vamos cogiditos de las manos.
Nos llegan muy de mañana y se van mucho después, regresan cada semana y cuatro veces al mes.
Aquí estamos doce hermanos; yo, que el segundo nací, soy el menor entre todos: ¿Cómo puede ser así?