En verano barbudo
y en invierno desnudo,
¡esto es muy duro!
más adivinanzas de la naturaleza...
El cielo y la tierra se van a juntar; la ola y la nube se van a enredar. Vayas donde vayas siempre lo verás, por mucho que andes nunca llegarás.
Sin vacación en sus cursos, al principio son pequeños, suelen nacer en montañas y morir de marineros.
Es una enorme naranja pero de zumo salado, los gajos se le suponen entre un par de meridianos.
Cuatro puntos son y para distinguirlos necesitamos del sol.
Él es tío sin sobrinos, a todos calienta igual. Si no sabes de quién hablo, tras la primavera vendrá.
Vuela sin alas, silba sin boca, azota sin manos y tú ni lo ves ni lo tocas.
No ves el sol, no ves la luna, y si está en el cielo no ves cosa alguna.
Vuela en el aire, pace en la tierra, se posa en los árboles, anda en la mano, se deshace en el horno y se ahoga en el agua.
En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene no más.
Van y llegan, se llevan lo que traen y lo que traen se llevan
