De nada me sirven,
estas cuatro patas,
que quieta estoy siempre,
sobre mí, el durmiente.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Es venta y no se vende, es Ana, pero no es gente.
Dicen que quien lo tiene es muy gracioso, se sacude en la mesa contra lo soso.
Vivo en alta situación y en continuo movimiento, con exactitud presento del aire la dirección.
Ya ves, ya ves, tan claro que es. No me la adivines de aquí a un mes.
Está hecha de metal, de madera o de cristal y golpes siempre recibe cuando la entrada prohíbe.
Sin ella en la mano ni entras ni sales, ni vas a la calle.
Con patas y espalda, no se mueve ni anda.
Un barbecho bien labrado, ni entra mula, ni entra arado.
Que timbre y número tenga y en verdad portal no sea es cierto, y el que desea hablar por él, no lo cuelga.
Es verdad que tú le miras, es mentira que te ve, sois iguales uno al otro, está claro que eres él.