Aparece por delante,
por los lados, por la espalda,
te descuidas un instante
y te levanta la falda.
más adivinanzas de la naturaleza...
Vuela sin alas, silba sin boca, azota sin manos y tú ni lo ves ni lo tocas.
Lleva años en el mar y aún no sabe nadar.
En mí se mueren los ríos, y por mí los barcos van, muy breve es el nombre mío, tres letras tiene no más.
Como el algodón suelo en el aire flotar, a veces otorgo lluvia y otras, sólo humedad.
Kilómetros mido, hectolitros llevo, kilovatios doy, hectáreas mantengo.
Vuela en el aire, pace en la tierra, se posa en los árboles, anda en la mano, se deshace en el horno y se ahoga en el agua.
En el cielo soy de agua, en la tierra soy de polvo, en las iglesias de humo y mancha blanca en los ojos.
Él es tío sin sobrinos, a todos calienta igual. Si no sabes de quién hablo, tras la primavera vendrá.
Llevo, sin ser arlequín, de colores mi librea, yo salgo de tarde en tarde y espero siempre a que llueva.
Nicanor tenía un barco y con él surcaba el río; ¿era este un barco pequeño o este era un gran navío? Lee despacio, Encarnación, y hallarás la solución.