En un cuarto me arrinconan
sin acordarse de mí,
pero pronto van a buscarme
cuando tienen que subir.
más adivinanzas de cosas de la casa...
En la mesa me ponen y sobre mí todos comen.
Cabecita fría la noche haces día cuando te restriego, cabeza de fuego.
¿Quién pensaréis que yo soy, que cuanto más y más lavo, mucho más sucia me voy?
Soy de cabeza redonda y me sostengo en un solo pie. Soy de tal fortaleza que a Dios hombre sujeté.
Con patas y espalda, no se mueve ni anda.
Dicen que tiene y no tiene, mucho pincha, poco retiene.
Ruedo y ruedo, y en los bolsillos me quedo.
¿Quién será la desvelada, lo puedes tú discurrir? día y noche está acostada y no se puede dormir.
En el buen tiempo a nadie marea, en cuanto llueve repiquetea.
Ya ves, ya ves, tan claro que es. No me la adivines de aquí a un mes.