En un cuarto me arrinconan
sin acordarse de mí,
pero pronto van a buscarme
cuando tienen que subir.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Aunque yo nunca me mueva por mí suben, por mi bajan; soy de diversas materias y mi utilidad la halagan.
Aunque de comida voy cargado, la gente me vacía, y nunca soy tragado.
Los tejados protejo y buenas canales dejo.
Está hecha de metal, de madera o de cristal y golpes siempre recibe cuando la entrada prohíbe.
Golpe va, golpe viene y en su puesto se mantiene.
Adivíname ésa.
Cuando la entrada yo les prohíbo, son muchos golpes los que recibo.
Tengo patas bien derechas, mas no me puedo mover, llevo a cuestas la comida y no la puedo comer.
A la entrada de tu casa algo suena si lo aprietan y tu sales presurosa a abrir deprisa la puerta.
La cara que yo acaricio, dejo de seda al momento, porque ni un pelo se resiste a mi marcha, ¡buen invento!
