Es una caja habladora,
que vive en todas las casas,
y se calla a muy alta hora.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Que timbre y número tenga y en verdad portal no sea es cierto, y el que desea hablar por él, no lo cuelga.
Aunque no hable, lo cuenta todo por cable.
Lo usa el tendero para comer, lo lleva entero si sabes leer.
¿Quién pensaréis que yo soy, que cuanto más y más lavo, mucho más sucia me voy?
Adivíname ésa.
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.
Tengo dientes y no muerdo, desenredo con cuidado, caminos abro en tu pelo, ya sea liso o rizado.
Es venta y no se vende, es Ana, pero no es gente.
Un animalito con cuatro dientes, que nos trae comida muy diligente.
Yo tengo calor y frío, y no frío sin calor, y sin ser ni mar ni río, peces en mí he visto yo.
