Estoy dentro de él
y no puedo entrar en él.
más adivinanzas de cosas de la casa...
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Doy vueltas y no soy tiempo, un secreto sé guardar, si no me cuidan, me pierdo. ¿Con mi nombre sabrás dar?
Sin ella en la mano ni entras ni sales, ni vas a la calle.
Aunque al dormir me consultan, nunca suelo contestar.
No soy el sol, tampoco el fuego; pero la casa bien que caliento.
Fui a la plaza y compré un negrito. Llegué a la casa y se puso coloradito. ¿Qué es?
Poseo dientes y ojos y para hacerme trabajar me has de meter en cerrojos.
En invierno se usa porque da calor en verano estorba y se echa al rincón.
En lo más alto me ponen para que el viento me dé, soy guía para los hombres y siempre estoy de pié.
Es una pera colgada que toda la casa alumbra sin tener humo ni llama.
