Pino sobre pino,
sobre pino, lino,
sobre lino, flores
y alrededor amores.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Soy liso y llano en extremo, y, aunque me falta la voz, digo en su cara a cualquiera la más leve imperfección; contesto al que me pregunta sin lisonja ni aflicción, y si mala cara pone, la misma le pongo yo.
Durante el verano escondido, en el invierno encendido.
Estoy dentro de él y no puedo entrar en él.
Cuando te veo me ves, cuando me ves te veo, y no te parezco feo.
Es una pera colgada que toda la casa alumbra sin tener humo ni llama.
Muy bonito por delante y muy feo por detrás; me transformo a cada instante, pues imito a los demás.
En la mesa me ponen y sobre mí todos comen.
Un campo bien labrado no gasta reja ni arado.
Aunque no hable, lo cuenta todo por cable.
Caja llena de soldados, todos largos y delgados, con gorritos colorados.
