Sin ella en la mano
ni entras ni sales,
ni vas a la calle.
más adivinanzas de cosas de la casa...
Aunque yo nunca me mueva por mí suben, por mi bajan; soy de diversas materias y mi utilidad la halagan.
La cara que yo acaricio, dejo de seda al momento, porque ni un pelo se resiste a mi marcha, ¡buen invento!
Sale de la sala, entra en la cocina, meneando la cola como una gallina.
Aunque al dormir me consultan, nunca suelo contestar.
De mi madre nací yo, sin fundamento de padre, y luego me he muerto yo y de mi nació mi madre.
De nada me sirven, estas cuatro patas, que quieta estoy siempre, sobre mí, el durmiente.
Aunque músculos no tengo, los techos yo sostengo.
Golpe va, golpe viene y en su puesto se mantiene.
¿Que le pones a una caja que la hace más ligera?
Tiene un ojo y nada ve, por abrir no es cosa dura, sin embargo por cerrar, sí que cierra y sí que es dura.
