Son dos cortinas
en dos ventanitas
que bajando ocultan
dos niñas bonitas.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Una capilla llena de gente y un capellán en medio que predica siempre
Podrás tocarlos, podrás cortarlos, pero nunca contarlos.
Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.
Con ella vives, con ella hablas, con ella rezas y hasta bostezas.
Porque no se caiga pagan, pero, si se cae, nadie se agacha a recogerlo.
¿Cuál es la mitad de uno?
Al dar la vuelta a la esquina tropecé con un convento, las monjas iban de blanco y el sacristán en el centro.
Si los abro veo si los cierro sueño.
¿Qué instrumento se puede escuchar, pero no se puede ver ni tocar?
Como la piedra son duros, para el perro un buen manjar, y sin ellos no podrías ni saltar ni caminar.