En un huerto no muy llano
hay dos cristalinas fuentes,
no está a gusto el hortelano,
cuando crecen las corrientes.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Son dos cortinas en dos ventanitas que bajando ocultan dos niñas bonitas.
Formamos, como soldados, en una fila y somos carniceros toda la vida
Enfundados siempre van y hay que tener cuidado con las patadas que dan.
Al dar la vuelta a la esquina tropecé con un convento, las monjas iban de blanco y el sacristán en el centro.
Uno larguito, dos más bajitos, otro chico y flaco, y otro gordazo.
Cueva con treinta y dos machacantes que dispone de un solo habitante.
Tiene grandes pabellones, pero no tiene habitaciones.
¿Quién seré yo que encerrada soy donde quiera que voy, me encuentro siempre mojada y al cielo pegada estoy.
Laterales parapetos, que van siempre por parejas, les encantan los secretos.
¿Cuál es la planta más olorosa?