Uno larguito,
dos más bajitos,
otro chico y flaco,
y otro gordazo.
más adivinanzas del cuerpo humano...
Si aciertas esta pregunta, te anotarás un buen tanto: ¿qué cosa acabada en punta tienes entre risa y llanto?
Ordenes da, órdenes recibe, algunas autoriza, otras prohíbe.
Formamos, como soldados, en una fila y somos carniceros toda la vida
Guardada en estrecha cárcel por soldados de marfil, está una roja culebra, que es la madre del mentir.
Vive en la panza y se enseña en ciertas danzas.
Cinco hijitos tiene cada una y dan tortazos como ninguna.
Del nogal vengo, y en el cuello del hombre, me cuelgo.
Una señora, muy enseñoreada, siempre va en coche y siempre va mojada.
Hay en la plaza nueva un monte, y en él dos cuevas. Más abajo un pozo hondo que tiene el brocal rojo. Altas ventanas, iguales, y en ellas, dos niñas bellas que, a través de los cristales, todo lo ven y lo observan.
Son dos cortinas en dos ventanitas que bajando ocultan dos niñas bonitas.